Sistemas sanitarios modernos, adecuados y sostenibles

Los sistemas sanitarios desempeñan un papel fundamental en las sociedades modernas, al ayudar a las personas a mantener y mejorar su bienestar físico y mental. Por otra parte, están sometidos a importantes presiones financieras. En la actualidad, la Unión Europea (UE) está potenciando la búsqueda de métodos para identificar las inversiones necesarias para garantizar unos sistemas sanitarios modernos, adecuados y sostenibles

ACTO

Conclusiones del Consejo sobre el proceso de reflexión relativo a unos sistemas sanitarios modernos, adecuados y sostenibles. Véase: Sesión del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores de los días 9 y 10 de diciembre de 2013.

Corrección de errores de la sesión del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores de los días 9 y 10 de diciembre de 2013.

SÍNTESIS

La Unión Europea tiene el compromiso de velar por que sus diversas políticas garanticen un alto nivel de protección de la salud humana y que sus actividades complementen las medidas adoptadas por los gobiernos nacionales, que tienen la responsabilidad final respecto a sus ciudadanos en este ámbito.

La salud constituye sin duda una importante prioridad personal. Y, además, tiene unas implicaciones más amplias para la sociedad. Estas van desde la disponibilidad de mano de obra y la productividad, en caso de que una enfermedad dé lugar a la pérdida de días de trabajo, al impacto que tiene el coste general del servicio sobre el gasto público. Estas áreas afectan a la competitividad general de la UE y a la salud de las finanzas de los gobiernos. La Unión Europea desempeña un importante papel en estas áreas, especialmente a través de su evaluación semestral de las políticas presupuestarias y fiscales nacionales así como en el marco de sus objetivos económicos, sociales y medioambientales de la Estrategia 2020.

Los gobiernos de la UE acordaron una serie de recomendaciones en diciembre de 2013 para cumplir el doble objetivo de garantizar la salud pública y unas finanzas públicas saneadas. Estas recomendaciones están dirigidas tanto a los gobiernos de la UE como a la Comisión.

Se solicita a los gobiernos que evalúen el impacto de las reformas sobre la salud, la pobreza, el empleo, la productividad y la competitividad. Se les insta a que garanticen que los servicios sanitarios y sociales dejen de estar fragmentados para pasar a integrarse en programas nacionales, regionales y locales.

También se les invita a que compartan las mejores prácticas para lograr modernizar los sistemas sanitarios para que estas puedan aplicarse de forma más amplia en la UE.

Las recomendaciones solicitan a las autoridades nacionales y a la Comisión que sigan evaluando los factores que influyen sobre la disponibilidad, la accesibilidad, el precio, el coste, la seguridad del paciente y la innovación de medicamentos y productos sanitarios, así como que trabajen juntos para disminuir la carga que conllevan las enfermedades crónicas.

Última modificación: 16.06.2014